martes, 23 de noviembre de 2010

Hora de Ler

Xa levamos un mes coa Hora de Ler. Unha actividade esperada polos alumnos que o curso pasado puderon disfrutar dela por primeira vez e novedosa para aqueles que se incorporaron en 1º de ESO en setembro.
Cando levamos aos grupos á biblioteca para elexir os libros, case non tivemos que explicar o seu funcionamento; mais que nada, recordar tanto aos profes como aos alumnos certas normas para garantir unha boa marcha da actividade: todos lemos, en silencio e nos momentos asignados. De momento, a cousa marcha e parece que os alumnos toman en serio o momento do cambio de libros e de cubrir o dossier de lecturas.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Humor poético

 Cando Eduardo Pondal
a unha ventana se asoma,
sal narís, narís, narís,
e a cara de alí a unha hora.

Eduardo Pondal(1835-1917)
Queixumes dos pinos




Érase un hombre a una nariz pegado,
érase una nariz superlativa,
érase una nariz sayón y escriba,
érase un peje espada muy barbado;

era un reloj de sol mal encarado,
érase una alquitara pensativa,
érase un elefante boca arriba,
era Ovidio Nasón más narizado.

Érase un espolón de una galera,
érase una pirámide de Egito,
las doce tribus de narices era;

érase un naricísimo infinito,
muchísimo nariz, nariz tan fiera
que en la cara de Anás fuera delito.


Francisco Gómez de Quevedo(1580-1645). Soneto a una nariz

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Barrio lejano



Título: Barrio Lejano
Autor: Jiro Taniguchi
Editorial: Ponent Mon(1 tomo)

El protagonista es un arquitecto de 48 años, padre de familia con un trabajo estable al que un trayecto en tren le devuelve de forma fortuita a la ciudad de su infancia. Tras recorrer su ciudad natal y no reconocerla, sus pasos le conducen al lugar en el que está enterrada su madre. Frente a su tumba recuerdará sus últimos años y su propio comportamiento, no demasiado ejemplar. Mientras él está perdido en sus recuerdos, el vuelo de una mariposa parece abrir una frontera invisible. Pierde el conocimiento y al despertar, se encuentra prisionero en el cuerpo de un adolescente: él, a la edad de 14 años. 
A partir de ese momento, tendrá que reconciliar sus conocimientos de adulto con su nueva realidad. Evitar la huída de su padre, prevista para dentro de unos pocos meses, se va a convertir en una obsesión. Durante tres meses, estudiará con nuevos ojos la situación familiar para entender ese hecho del pasado que marcó a su familia de una forma tan dramática. 
El azar le llevará a encontrarse también con antiguos profesores y compañeros de instituto, conocer el amor adolescente, reconocer el cariño de la familia y el poder de la juventud y sobre todo, entender que las cosas, muchas veces, no son tan sencillas como uno  se imagina.
Del mismo autor, también tenemos en la biblioteca otro viaje lleno de nostalgia al pasado : El almanaque de mi padre.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Novedades

El lunes estarán a vuestra disposición estas dos pequeñas joyas sobre el placer de la lectura.

84, Charing Cross Road es la dirección de la tienda de libros antiguos a la que Helene Hanff, la escritora, estuvo escribiendo cartas a lo largo de veinte años para solicitar clásicos de la literatura inglesa en un afán de mejorar su formación.
Cartas que van y vienen desde Estados Unidos a Inglaterra serán testigo de un cambio: lo que comenzaría siendo una simple relación comercial con el librero, acabará por convertirse en una amistad que implicará no solo al resto de los empleados de Marks & Co si no hasta a sus propias familias.

Entre los muchos ejemplares que la autora solicita a la librería se encuentra El lector común, de Virginia Woolf que nos sirve para presentar el siguiente libro.
Se trata de Una lectora nada común de Alan Bennet, cuyo título original -The Uncommon reader - supongo es un guiño al de la escritora inglesa. Un vistazo a la portada ya nos anuncia quién será el personaje principal de esta preciosa historia...
Pero nada nos avisa sobre la fina ironía que se encuentra entre sus páginas, el amor por la lectura que desprende y el respeto hacia un personaje del que nos gustaría creer todo lo que se fabula en el libro.
Si todos los que con sus decisiones pueden alterar el curso de los acontecimientos se transformaran como la protagonista, otro gallo nos cantaría porque tal como dijo el crítico Manuel Rodríguez Rivero a propósito de su publicación:
"Todos los políticos, sean o no ministras o ministros, (...)además de sus esposos o esposas, sus asesores, sus guardaespaldas, los chóferes de sus coches, los directores generales, los guardias civiles que controlan la seguridad de los ministerios, y hasta los mismísimos monarcas y la Royal Family española en pleno, deberían leer Una lectora nada común."
Realmente, es una novela repleta de pasajes para atesorar.Yo me quedo con este:
"Lo que asismismo estaba descubriendo era que un libro llevaba a otro, nuevas puertas se abrían dondequiera que mirase y los días no eran lo bastante largos para leer todo lo que ella quería"

lunes, 8 de noviembre de 2010

Sin noticias de Sin noticias de Gurb

Este título tan reiterativo viene a cuento porque este libro de Eduardo Mendoza ha estado desaparecido durante todo el pasado curso escolar, tal y como le ocurre a uno de los extraterrestres de los que habla el libro. Y no, no ha tomado la identidad de El viejo que leía novelas de amor o tal vez, de A lagoa das nenas mudas, sino que un alumno de 2º Bach tenía que devolverlo in extremis en junio y al fin nos lo trajo...en octubre.

Bajo la forma de un diario, cuenta la historia de un extraterrestre desesperado por encontrar a su compañero de nave en la Barcelona previa a los Juegos Olímpicos. Tratando de pasar desapercibido en la Tierra, el protagonista juega a la suplantación de identidades adoptando apariencias tan dispares y anacrónicas como la del torero Frascuelo o el Duque de Lerma y no es de estrañar que desentone más que un elefante en una cacharrería.
Se trata de una novela para pasar un buen rato disfrutando de un humor absurdo y surrealista, similar al de El laberinto de las aceitunas o El misterio de la cripta embrujada del mismo autor.
A principios del curso pasado, nos fue solicitada por el profesor de Filosofía y es que existen algunos estudios críticos sobre la novela como el que enlazamos aquí, de un profesor de la Universidad Complutense de Madrid.
Pero si no queremos buscarle tres pies al gato, podemos simplemente reirnos con descripciones como esta:
"Como la calle dispone de una pendiente pronunciada, el paseo en bicicleta se subdivide en dos partes bien distintas entre sí, a saber: a) bajar, b)subir. La primera parte(bajar) es una gozada; la segunda(subir), una tortura. Por suerte, la bicicleta lleva adosados a ambos lados del manillar sendos frenos. Los frenos, al ser accionados, impiden que la bicicleta adquiera una velocidad creciente o acelerada en la bajada. En la subida, los frenos impiden que la bicicleta vaya hacia atrás."

jueves, 4 de noviembre de 2010

Libros al sol

Desde hace tiempo, es habitual encontrar gente leyendo en la playa mientras toma el sol. Lo que ya no es tan habitual es que esta iniciativa parta de un ayuntamiento, como ocurre con la campaña Bibliomar en Valencia, en funcionamiento desde el 2006 .
Durante los meses de verano, estas pequeñas bibliotecas, ofrecen a los bañistas un refugio donde leer o realizar talleres de temática variada.
El punto de lectura que reproducimos lo hemos encontrado en la playa de la Malvarrosa pero no es el único. Otras dos playas de la capital comparten este proyecto.