En esta semana en la que estamos trabajando sobre la violencia de género en el instituto no estaría de más reflexionar sobre como a veces la publicidad no parece tener límites. De todos es sabido que en muchas ocasiones, los creativos de este campo han sustentado sus campañas en enfoques sexistas pero de ahí a utilizar la violencia-cualquier tipo de violencia-como reclamo hay un abismo. Como muestra estas imagenes:
¿El fin justifica los medios?